08 de Noviembre del 2024
PACHUCA.- Después de tres meses y tres días de prisión, Cristian N. obtuvo su libertad inmediata tras aceptar su responsabilidad por agredir a “Jefazo”, un perro pitbull que murió el 6 de agosto debido a un machetazo en la espalda.
La decisión fue tomada en una audiencia celebrada este viernes en los Juzgados Penales de Pachuca. Cristian, de 24 años, fue vinculado a proceso por delitos contra la vida y el bienestar animal, luego de que se le acusara de causar la muerte de “Jefazo” con un machetazo.
El proceso estaba cerca de concluir, pero se optó por una salida alterna que permitió la liberación de Cristian. En la audiencia, el Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) propuso una pena de cuatro años de prisión y una multa de 125 Unidades de Medida y Actualización (UMA), equivalentes a 13 mil 571.25 pesos.
Además, se solicitó una reparación del daño por 8 mil 970 pesos a favor de Vania Castillo Lugo, quien rescató al perro y cubrió los gastos veterinarios antes de su fallecimiento. También se propuso que Cristian ofreciera una disculpa pública y se comprometiera a no repetir el acto.
La jueza Karina Vertiz Marín explicó que al optar por el proceso abreviado, Cristian aceptaba su responsabilidad penal, lo que evitaba el juicio oral y una posible sentencia de entre 1 año y 6 meses y 6 años de prisión. El imputado aceptó esta opción y la jueza dictó la condena de cuatro años, tal como lo había solicitado el Ministerio Público.
Sin embargo, debido al tiempo que Cristian ya había pasado en prisión, la jueza conmutó su pena por 365 jornadas de trabajo en la alcaldía de Mineral de la Reforma, donde reside. El monto de la multa fue ajustado a 12 mil 708.12 pesos, tras descontar los tres meses de prisión preventiva.
Durante la audiencia, el acusado ofreció una disculpa pública. “Vengo a pedir disculpas a los presentes, a mi familia y a la sociedad en general. Fue un acto excesivo que no debió ocurrir. Mi tiempo en prisión me hizo darme cuenta de lo equivocadas que fueron mis acciones. Me comprometo a no repetirlo, ser mejor persona y, si es necesario, ir a terapia”, dijo.
Con todos los acuerdos cumplidos, la jueza ordenó la inmediata liberación de Cristian y giró los oficios correspondientes al Cereso de Pachuca para gestionar su salida.