13 de Enero del 2025
PACHUCA. – Armando recibió un disparo en el cachete derecho y la bala que le entró al cuerpo se alojó en su columna. Tres meses después del ataque falleció, pero antes de perder la vida logró señalar al presunto agresor: su amigo, quien ahora enfrenta un juicio por homicidio doloso.
Ángel N es el individuo acusado por Armando C.S., la víctima que falleció el 27 de diciembre de 2023 tras salir del Hospital General de Pachuca a donde ingresó al menos tres veces seguidas luego del ataque en su contra.
Aquel 29 de septiembre de hace 16 meses, Armando, quien amaba el billar, era músico e incluso había sido parte de la Banda Sinfónica, se reunió con Ángel, un ex policía al que conocía porque tenían el gusto por jugar. Incluso, ambos asistían a torneos.
Previo al momento del ataque jugaron en un billar cercano al bulevar Minero, después decidieron que irían a bailar, pero antes pasaron por dinero a casa de la víctima.
Cuando ya transitaban sobre la carretera con rumbo hacia el pueblo mágico del Real del Monte, cerca del acceso hacia el monumento del Cristo Rey de Pachuca ocurrió la agresión: Ángel golpeó a su amigo, lo hincó y le robó 70 mil pesos.
¡Ya valiste madre!, fueron las palabras que le dijo el acusado a la víctima antes de accionar el arma de fuego en su rostro, según expuso la asesoría jurídica durante los alegatos del juicio oral 191/2024 por el delito de homicidio doloso.
La bala perforó parte del rostro de lado derecho de Armando y se desmayó, mientras que ángel huyó del lugar. A pesar de la herida, la víctima despertó y alcanzó a hablarle por teléfono a su hermana, también le envió la ubicación de su paradero.
Cuando ella llegó a la zona a bordo de su camioneta, observó a su hermano sangrar de la cara y se lo llevó al hospital.
Mientras que al interior de la sala 2 de los Juzgados Penales, Juicio Oral y Ejecución de Pachuca se desahogaba el juicio, afuera del inmueble judicial algunos familiares colocaron cartulinas fosforescentes para exigir justicia. Daniela, la hija de Armando, pidió que el asesinato de su padre no quede impune.
“Me dejó sin papá y mi abuela falleció porque no pudo superar la pérdida de su hijo. Espero que se haga justicia, espero que le den los años que se merece (…) Ahora sabemos que no debemos confiar en cualquier persona, supuestamente era su amigo y le disparó, lo traicionó”.
ARMANDO FALLECIÓ TRAS SALIR DEL HOSPITAL
Durante la audiencia, la hermana de Armando dijo que atendieron a su familiar en el General de Pachuca, suturaron la herida que tenía en la lengua que estaba casi desprendida, también se vio afectada la mandíbula, los dientes y, aun así, lo dieron de alta el mismo día.
Al siguiente regresó por el dolor que sentía, aunque en la clínica le dijeron que era normal. Se fue a casa, pero volvió de nuevo al hospital debido al dolor que le ocasionó una infección en la tráquea por la pólvora que se dispersó y le quemó por dentro.
Fue el 4 de octubre cuando se le dificultó respirar y convulsionó, hasta ese momento los médicos observaron que la bala había quedado atorada en la columna entre las vértebras 4 y 5. Lo operaron, le pusieron una sonda, lo conectaron a un respirador y aunque estaba consiente, dejó de hablar.
Su hermana Marisela recordó que Armando solo movía los ojos para comunicarse. Cerrar los ojos una vez significaba “sí” y dos veces seguidas, eran un “no”.
Después de navidad, los médicos dieron de alta a Armando y aunque llegó a casa, falleció el 27 de diciembre de 2023 a las 4:30 de la madrugada, casi tres meses después del disparo, hechos que tienen a Ángel N en reclusión y en espera de una sentencia que podría ser condenatoria o absolutoria.
“Mi hermano era un hombre sano, tenía 44 años. Nosotros somos su voz y no vamos a parar hasta que haya justicia porque el agresor conocía el uso de la fuerza porque él fue policía y causó baja (…) La familia Catalán Sánchez somos la voz de mi hermano”.
Marisela advirtió que la defensa del acusado intenta argumentar que la muerte fue por causas naturales, pero puntualizó que Armando murió por las complicaciones en su salud a raíz del disparo.
El Ministerio Público (MP) de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) pidió una pena de 40 años de prisión para Ángel N, así como la reparación del daño por 731 mil 811 pesos y una multa de 500 Unidades de Medida y Actualización (UMA) que significarían 51 mil 870 pesos, toda vez que en 2023 -cuando se cometió el delito- la UMA valía 103.74 pesos.